Situada a pocos metros de la playa de Playa Grande, nuestra Surfhouse ofrece un ambiente cálido, acogedor e informal, donde cada detalle está pensado para que te sientas como en casa, desde el primer momento.
Las habitaciones son sencillas pero están bien cuidadas, equipadas con aire acondicionado, baño privado, ventilador y Wi-Fi. Tanto si viajas solo, en pareja o con amigos, encontrarás la solución adecuada: desde habitaciones privadas con cama doble hasta opciones compartidas más económicas.
Cada habitación está inmersa en el verdor del jardín tropical y diseñada para ofrecer tranquilidad y contacto con la naturaleza, a sólo unos pasos de la playa.
Las zonas comunes están diseñadas para fomentar el encuentro entre los huéspedes: la piscina central con tumbonas, la zona de estar al aire libre, el bar y el restaurante se convierten en auténticos puntos de encuentro, donde compartir experiencias, relatos de olas cogidas y puestas de sol vistas desde la playa.
También hay un restaurante en el campamento de surf que ofrece platos frescos y sabrosos inspirados en la cocina local e internacional. Puedes elegir un paquete con comidas incluidas, perfecto para quienes sólo quieren pensar en surfear, relajarse y disfrutar del día.